nadie levita

El sábado pasado, mientras trabajaba tooooooda la tarde, me llevé Goodbye yellow brick road porque tenía antojo. Hacía un buen rato que no lo escuchaba. Un Elton John de la buena época, de cuando no estaba rehabilitado. Adoraba ese album.

Debe haber sido un día de esos de autocrítica a flor de piel. En un instante, mientras escuchaba detenidamente, me descubrí preguntándome cómo podía gustarme semejante porquería. La porquería que durante años se había sostenido en mis principios fundamentales del buen gusto.

¿Cómo llegué a defenestrar lo que alguna vez obtuvo mi devoción? Veamos.

Track 1: Funeral for a friend (love lies bleeding) Este es un disco de esos que empiezan en el track 2.

Track 2: Candle in the wind . Dedicado a Marilyn Monroe, un rapto de cholulismo de la dupla autoral. Un tema porque sí, como si yo le escribiera un poema a Juan Castro porque se le dio por morirse. Igual. Es ese mismo que agiornó para otra muerta, Lady Di en Goodbye England Rose. (Nota: me pareció de cuarta que reciclara la canción. Como regalar algo usado, viste?...)

Track 3: Bennie & the Jets. ¿Quiénes corno son Bennie & the Jets? Nadie lo sabe. El tema es un hit, potable si se quiere. En vivo, nunca se grabó en estudio. Zafa.

Track 4 : Goodbye yellow brick road. El primer corte. Una baladita nostálgica que a nuestros padres les repica en el subconsciente. Del baile de graduación de Marge y Homero.

Track 5: This song has no title: Nos recuerda que Elton toca el piano y cuánto.

Track 6: Grey Seal. Prescindible.

Track 7: Jamaica jerk-off. An Englishman cantando reggae jeropa.

Track 8: I’ve seen that movie too. ¿Nunca se le ocurrió mandarse un blues de vez en cuando? Bastante bien. Pero, ojo:de-vez-en-cuan-do o se te duerme la platea.

Track 9. Sweet painted Lady. Esta es una de las aguafuertes de este disco. Habla de una prostituta, lo mal que la pasa, etc., etc.

Track 10: The ballad of Danny Bailey (1909-34) Se trata de un personaje mítico de EE UU. De esos criminales que les gusta que queden en la historia.

Track 11. All young girls love Alice. Empecinado en pintar minorías, he aquí una lesbiana.

Track 12: Dirty Little Girl. Una chica que no se baña.

Track 13: Your sister can’t twist (but she can rock & roll). Un rock histérico, muy histérico. Divertido.

Track 14: Saturday night (is alright for fighting). Uno de los que más conserva en su repertorio. Un rock clásico que, al lado de Your sister..., parece el Ave Maria.

Track 15: Roy Rogers. Sí, ese el de la serie en blanco y negro y el caballo. Un homenaje lacrimógeno al pionero de los TV-cowboys en un envoltorio country.

Track 16: Social Disease. “Lacra social�. Más conciencia ídem.

Hasta aquí, había decidido enterrar el Cd y sacarlo cuando sea abuela. Me autoflagelé pensando en que no tenía claros los límites de lo que se considera basura. ¿Tendría que rever mi música? ¿Por qué si antes era tan bueno ahora es tan berreta? ¿por qué ahora encuentro en él tanto material descartable? Hasta que...

Track 17: Harmony. Cuando el disco estaba al borde del destierro, sonó Harmony. La baladita salame, pegajosa y eficaz. Boba, pero justifica el álbum. El moño rosa del disco, salvó a todo lo anterior. Lo pequeño, pequeñito y ñoño que, casi al final, me respiró cerca.



Voy a guardar el Cd un tiempo. Con una leyenda de advertencia: ESCUCHAR DE ATR�S PARA ADELANTE. Tal vez, a la distancia y con la miopía de la nostalgia, no me parezca tan insufrible.

Hello, Baby, hello
haven’t seen your face for a while…

Nacía Reginald Kenneth Dwight.

Feliz cumpleaños, Elton.

Cuando subo a un colectivo, me gusta sentarme en el segundo asiento de la izquierda para verme en los espejos. Oh, gran desilusión cuando en el micro semilleno (o semivacío, según el estado de ánimo) descubro que ese lugar está ocupado.

Un instante antes de subir me esperanzo. Luego, la ilusión se desmorona y me desengaño. Finalmente, me olvido.

Eso acaba de ocurrirme. En un segundo, por casualidad, advertí que la butaca ya había sido conquistada. Que otro pasajero se miraba en el espejo, de reojo y sin ansias. Que ese otro hasta reniega del lugar por estar demasiado adelante. Que la misma persona, para hacer tiempo, tomó el colectivo para dar la vuelta y bajarse donde subió.

Y yo me quedo sin espejo, hasta que vuelva a funcionar el mecanismo esperanza-desengaño-olvido.

Una de esas personas que se afana por saber el significado de absolutamente todo, me preguntó acerca de los “20 años pensando epitafios�. Yo no tenía ganas de explicar nada, así que gambeteé la pregunta. Inmediatamente repreguntó: “¡Pero cómo 20 años!, si vos tenés 26, ¿ te estás sacando edad?�

Ante tan boluda acotación preferí, también, no responder.

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Soluciones:

a) sí, tengo 26 años;
b) llevo 20 años pensando;
c) los primeros seis años de vida no tenía uso de razón. Como todo el mundo, ooooobvio.

La chica de la despensa cerca de casa hace honor a la estirpe almacenera y conoce TODOS los movimientos de TODOS los vecinos. Y si no lo sabe, lo investiga. Y si no, inventa.

Fui a comprar puchos e inquirió: “¿Hace cuánto que cortaste con tu novio? ¿Va a hacer un año en mayo, no?�

La precisión del dato me sorprendió. “Sí, y... ¿cómo sabés?�, pregunté.

Certera, concluyó: “Y... porque más o menos en esa época dejaste de comprar las cantidades de cerveza que comprabas antes todos los días...�

Otra situación en la misma clase con la misma catequista que escribió hurtarás sin hache y a raíz del mismo mandamiento:

Alguien pregunta: - ¿Qué significa “No hurtarás�? ¿Qué es hurtar?

La catequista (en apuros) : - Y... que no hurtarás, de no hurtar, de no cometer hurto..., eso, “no hurtarás....�

Silencio. Nadie preguntó nada más por piedad, tal vez. La chica continuó precipitadamente con el siguiente mandamiento.

Esto demuestra que la tautología es, indudablemente, una rama de la Teología.

Nunca tuve demasiadas motivaciones religiosas ni me atormentó mucho la cosa mística. Creo que por una cuestión de snobismo - si todos lo hacen, por qué yo no - comencé a escorchar con ir a catequesis.
Como cuando era chica estaba más al pedo que ahora, a los once empecé a ir los sábados a la tarde a catecismo.

En la tercera clase aparece en escena una catequista adolescente de dieciséis o diecisiete años. El Tema: mandamientos. La muchachita catequista escribió sobre el pizarrón cada uno de los puntos del decálogo, 1°- amar a dios sobre todas las cosas, etc... La niña concluyó la lista sagrada. Había cometido unas cuantas faltas de ortografía, imperdonables todas por Dios o por cualquiera:

- Se había tragado como tres eses;
- Segundo mandamiento: “No tomarás el santo nombre de Dios en bano�;
- Octavo mandamiento: “No urtarás�

Yo era tímida, muy tímida, pero no quería que se cometiera ningún otro atropello lingüístico, y le advertí: “ disculpame, pero vano es con ve y hurtarás es con hache�. La tiernísima catequista me agradeció entre dientes, se sonrojó, tartamudeó e, incómoda, corrigió sus faltas. En ese momento protagonizamos un duelo de preceptos: los divinos vs. los gramaticales del cual ambas salimos victoriosas.

¿ Por qué ambas? Luego de aquella clase, llegué a casa y le comenté a mi vieja:

Yo. -Mamá, no quiero ir más a catecismo...
Mamá. -¿Por..?
Yo. - Me aburro y la catequista tiene errores de ortografía...
Mamá. - Bueno, no vayás más.

Yo también corregí mi curiosidad por la religión y no fui más.

La ortografía fue, entre otros, uno de los dioses paganos que me alejó de la fe.

Estoy extrañando.

Estoy extrañando a cuenta.



No pidan que explique porque nadie entiende a las mujeres, che.

Hace poco se me quemó la compu. Fue el rígido que se asó al espiedo.
Perdí archivos. Fotos, lo que más me dolió fueron las fotos.

Algo que me dijo el técnico lo que desató mi paranoia: "Si hay tormenta, desconectá el modem. Se te puede quemar de nuevo..."

Por estos lugares no llueve nunca. En este momento, está cayendo una garúa pedorra. Y tengo toda la sensación de estar desafiando al destino.

Si estás al pedo, la peor idea que se te puede ocurrir es gastar guita. Muchas veces lo hice. Y quién no.

Aquí unos tristes ejemplos:

- Pagar una cabalgata pedorra en Bariloche
- Ver Tango Feroz en el cine
- Comprarme una malla barata
- Alquilar Dirty Dancing
- Ir a ver al Tomba
- Comprar la revista 13/20
- Ir a jugar al paddle
- Comprar Don’t shoot me, I’m only the piano player
- Dos años de taller literario
- Pedir una pizza en el casino de Mar del Plata
- Comprarme patines
- Comprar una base de maquillaje de Mary Kay dos tonos más oscuros que mi piel


Hay más que ahora no me acuerdo. Pero si no hubiera tirado esa plata, hoy tendría un Gol 2001 (mínimo).

Este blog lo encontré yo sola y sin ayuda. ( A veces la suerte nos sorprende, qué loco.)

Descubrimiento reciente y grato.

Pasen a la jaula y quédense dentro.

Si tu interlocutor nota que estás de mal humor por MSN, es lo menos.

Esta es una quote de Pedro Marchetta, D. T. Cuando dirigía en Córdoba. Hablando de uno de sus dirigidos, comenta:

"No sabés el arquero que tengo...Le pateás un colchón y se lo clavás en el ángulo."

The rose is red,
violets are BLUE...

Otra vez.

Mi amiga me comenta de mi ex:

Ella dice: "Lo vi y estaba bien, de buen humor...con su nueva novia. Hace dos meses que no toma. Consume muy poco. Está trabajando...."

Yo pienso: "Ahora falta que me diga que se baña todos los días...."

"Si venís a San Rafael en julio, yo tengo una cabaña.Te venís..."

"¿Cuándo vas a venir a Córdoba, vos? Parás en casa, eh?

"Cuando vengas con tu familia a Buenos Aires, vos te quedás conmigo, en mi casa..."

"Ya vivo sola. Alquilé un depto en Lanús, cerca de la estación. Te quedás conmigo, no pagues hotel."

"Mis viejos no van a estar, se van a Europa. Mi casa es grande, hay mucho espacio para que te quedes." (Buenos Aires)

"Si querés, te venís para Semana Santa con tu amiga (yo) y se quedan en mi departamento nuevo..." ( Mar del Plata)

YA ESTOY PREPARADA PARA LA VIDA NÓMADE.

Ah, lo que Bianchi quiso decir es que tiene un equipo de HOBBITS...

Very, Pet Shop Boys, 1993.

"Dreaming of the Queen
visiting for tea.
You and her and I
and Lady Di..."