nadie levita

nadie levita

viernes, marzo 18, 2005

 

IV - Loa Sobria

Ella cuenta:

"Ayer desafié a dios y su existencia -presunta existencia- y confirmé que, como sospechaba desde siempre, no existe. Quise militar en la fe por un rato, pero se me negó el acceso a toda creencia. Nada cambió. Anoche busqué en el refugio de siempre, donde el instinto me lleva. Sabí­a que allí­ se alojaba. Estaba ahí­ donde busqué. Allí, antes de que mi torre de Babel colapsara, encontré al huésped, al habitante. Experimenté el mismo sobresalto que cuando perdí­ el mejor de mis abalorios, como si el primero de mis elementos huyera detrás del abandono. Mirá, me dijo, y el metal me transportó de nuevo al deseo de no saber de metales. Me hubiera arrojado sobre el hallazgo como la mayor de las bestias, capaz de devorar a toda la Creación. Pero preferí reprimir el apetito de inorgánica bijouterie. Sin saber cuándo, me estaba yendo detrás de algo. Sólo dios sabría detrás de qué si tuviera la delicadeza de existir y publicarlo. Mi tendencia a la síntesis me lleva a huir de los monólogos y ya te debo estar aburriendo. Perdón por ser tan autobiográfica y coloquial. Pero es mejor así­, porque estas palabras ahora se te olvidan, se te borran y son anagramas de otras. Lo bien que hacés en olvidar. Peor hubiera sido contarte todo esto por escrito, en cursiva y recorriendo cada una de estas palabras en perfecta caligrafía."

Comments: Publicar un comentario



<< Home

Archives

octubre 2003   noviembre 2003   enero 2004   febrero 2004   marzo 2004   abril 2004   mayo 2004   junio 2004   julio 2004   agosto 2004   septiembre 2004   octubre 2004   noviembre 2004   diciembre 2004   enero 2005   febrero 2005   marzo 2005   abril 2005   mayo 2005   junio 2005   julio 2005   agosto 2005   septiembre 2005   octubre 2005   noviembre 2005   diciembre 2005   febrero 2006   marzo 2006   abril 2006   mayo 2006  

This page is powered by Blogger. Isn't yours?